Ciudad de México, a 20 de julio de 2020Miss Alejandra M. Flores R.Todavía recuerdo cuando hace 6 años asistí a la escuela Iskalti por primera vez, usted me recibió muy amable, comencé a platicarle sobre mi hijo Patricio de 6 años y la posibilidad de que me lo recibieran en Iskalti. En ese momento, le comenté sobre la problemática que, en los últimos años, habíamos estado viviendo mi familia con las escuelas de preescolar en que mi hijo había asistido y sobre las continuas pláticas y cuestionamiento que nos hacían sobre él, ya que no entendían por qué no adquiría los conocimientos al igual que los otros niños del colegio, a mi hijo le costaba trabajo interactuar con los otros niños porque simplemente no sabía cómo hacerlo. Nos llegaron a enviar con diversos especialistas, como fue el caso de una Optometrista, que le impartió varias sesiones que de nada sirvieron, decían que su comportamiento se debía a que lo teníamos muy consentido; hasta que por fin mi esposo y yo llegamos con una Neuropsicóloga que después de varios estudios y cuestionarios le diagnóstico TDA, nos sugirió inscribirlo en una escuela que tuviera grupos reducidos, a fin facilitar el aprendizaje y de que tuviera una atención personalizada y así fue que buscando llegamos a la escuela primaria Iskalti.En aquella ocasión, usted muy atenta escuchó y me tranquilizó al describir exactamente el reto que presenta para un pequeño con TDA el aprendizaje, ahí me di cuenta del conocimiento, preparación y la calidad humana que existe en Iskalti.
Con el paso del tiempo y mi hijo ya estando en Iskalti, me percaté que la experiencia vivida de otros padres con sus pequeños era muy similar a la vivida por nosotros. Todo ello debido a la falta de conocimiento, por parte de las escuelas al existir un nulo interés y preparación en este tipo de aspectos que presentan los niños.Desde el primer día que mi hijo llegó a Iskalti, quedé convencida de que mi pequeño estaría mejor y se acoplaría muy bien con ustedes, y así fue. Día a día fui testigo cómo mi hijo se apegó y comprendió muy bien las reglas que debería cumplir en Iskalti, lo bien que las mismas le hicieron, ya que le brindaron tranquilidad y con el tiempo fue adquiriendo mayor confianza, conocimiento y mejoró su actitud.
Hoy en día es un niño que ha crecido y sea fortalecido, claro que continua con su proceso de maduración y aprendizaje, todo ello gracias a ustedes que le han dado todo el apoyo, enseñanza y comprensión necesarias. Bien lo dicen Iskalti “Lugar de Crecimiento”.
No tenemos más que agradecerle a usted y a todos los profesores y personal que forma parte de Iskalti, por su conocimiento, vocación de servicio, paciencia, entrega y su gran amor hacia los pequeños.
Todos ustedes marcaron un antes y un después para Patricio, dándole la confianza para continuar aprendiendo y preparándose. A todos los profesores y personal que forman parte de ISKALTI, muchas gracias
Finalmente, como dice mi Patricio: “ISKALTI siempre te recordaré como la escuela que me quiso recibir y me dio mucho amor y cariño”.[if gte mso 9]>
GRACIAS ISKALTI La llegada de mi hijo a nuestra familia fue un milagro literalmente DIVINO, uno tiene planes, ilusiones, que arropa con amor en la espera de la llegada de nuestros hijos.Los pequeños logros como gatear, caminar y hablar nos llenan de orgullo y felicidad, los tropiezos y las señales de independencia que nos van dando, nos recuerdan que ellos son un tesoro prestado, que, a pesar de tener el instinto de envolverlos en una burbuja para protegerlos, sabemos que ya no será posible en cuanto entren al kinder, pues es la primera gran separación de nosotras.En mi caso su entrada al mismo fue con gran ilusión y felicidad, pero el día que me llamaron del kinder, todo ese mundo se desplomó, el panorama que me pintaron era de un niño terrible, las poco éticas, insensibles e ignorantes palabras que describieron a mi hijo me hicieron una profunda herida, miles de incógnitas y miedo me abordaron. No sabía a quién acudir, ese día fue la primera vez que conocí a MISS ALE, amablemente tomó mi llamada, escuchó mi caso y me concedió una cita, acudí puntualmente. De inmediato su calidez, empatía, profesionalismo, inteligencia y preparación me llevaron a pedirle que recibiera a mi hijo, para mi sorpresa ella me había recibido por vocación y ayuda sincera, pues mi hijo estaba en kinder 1, y como sabemos ISKALTI es primaria, es decir, el tiempo que Miss Ale me dedicó fue por amor a su profesión, batallé un poco para el kinder, finalmente lo terminó aceptablemente.Pensando que el mundo estaba sensibilizado para un niño “hiperactivo” con TDA, decidí inscribirlo en una primaria pública, omitiré lo que ocurrió en 2 días, pero afortunadamente recordé a la hermosa Miss Ale, que años atrás, me había tendido la mano de manera solidaria, y sí, la respuesta fue igual, AMOROSA, EMPATICA, AMABLE, sabiendo que el rechazo y daño que el mundo le hace a nuestros hijos, nos rompe por dentro a las mamás. No se habló de dinero, me dijo (parece que fue ayer) “Señora, puede traerlo 3 días con su lunch y ropa cómoda, vaya usted a su viaje de trabajo y cuando vuelva pregunte a su hijo cómo se sintió y entonces platicaremos de lo demás”A partir de ahí, casi no hay día que recuerde a Miss Ale sin que las lágrimas de agradecimiento corran por mis mejillas, la gratitud ante tanto amor, tanta dedicación, tantos cuidados, paciencia y respeto … hoy permiten que mi hijo Jorge sea ya un joven a días de entrar a la secundaria.Las maestras Lupita, Viole, Miss Lulú, Paty, el resto de los profesores marcan positivamente la infancia de mi niño.GRACIAS!!!!! PORQUE MI HIJO TUVO UN GRAN HOGAR LLAMADO ISKALTI, QUE CONSTRUYÓ LAS BASES DEL JOVEN QUE AHORA TIENE LA SEGURIDAD, FORTALEZA, VALORES Y HUMANIDAD QUE LE SERVIRÁN PARA SALIR A ESTE MUNDO!![if gte mso 9]>
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NUESTRA HISTORIA ENTRE TUS BRAZOS…. ISKALTI.
DAVID Y EMILIO.
Nosotros como todo matrimonio esperamos con amor y llenos de ilusión la llegada de nuestros hijos.
Tomamos nuestros cursos psicoprofilácticos(aquellos que crees te enseñan todo)… seguimos los consejos que nuestros familiares y amigos más experimentados nos dieron y así llenos de alegría nació nuestro primer hijo de nombre David en el año 2002.
PRIMERA ETAPA: LAS PRIMERAS SEÑALES…
Siguiendo los consejos y queriendo brindar la mejor educación y desarrollo de nuestro pequeño lo ingresamos a los 5 meses de edad a estimulación temprana de Gymboree.. En ese momento David era un bebé sumamente cariñoso y muy sonriente que seguía sin problema las instrucciones de su madre y profesoras. David continuó hasta los 3 años en esta institución empezando por pre-school. Durante esta etapa de su vida nuestro pequeño empezó a tener ciertas diferencias con respecto al desarrollo de otros niños de su edad, entre otras:
• No masticar los alimentos.• No realizaba los ejercicios de motricidad al mismo ritmo que el grupo.• Dificultad en el lenguaje.• Incapacidad para tomar el lápiz correctamente, y como consecuencia no le prestaba atención a realizar ningún tipo de ejercicio manual.
Resultado: David empezó a mostrarse irritante para ir a la escuela debido a que no seguía el ritmo.
Nuestra reacción como padres después de varias reuniones con la escuela y directivos fue cambiarlo de escuela a una de mayor experiencia y sólidez. Y así comenzó una nueva etapa.
SEGUNDA ETAPA: SE CONFIRMAN SUS DEBILIDADES.
Colegio Alexander Bain.
David ingresó a los 3 años y 9 meses al Centro de Estimulación Temprana del Colegio Alexander Bain y permaneció hasta los 6 años y 7 meses correspondiente a KIII. En este colegio la educación es de carácter conductual y bilingüe. Cada salón tiene siempre una miss, nanita de grupo, ayudante de nanita y psicólogas/pedagogas que observaron el desarrollo de David. Nos brindaron apoyo y encontramos directrices que nos fueron guiando para apoyar las debilidades mostradas en su desarrollo, y como resultado en general las recomendaciones fueron las siguientes:
1. Terapia de lenguaje.2. Terapia de psicomotricidad.3. Terapia cognitiva.4. Terapia para su desarrollo de motricidad fina.
Resultado: David empezó a tomar terapias desde los 3 años y hasta los 6 años, sin ningún avance determinante que mostrase un desarrollo preciso para alcanzar los objetivos de desarrollo propios de la edad.
Es importante mencionar los aspectos emocionales que nuestro hijo fue viviendo, primeramente la frustración de no seguir el ritmo de los demás compañeros, y si a esto le sumamos la magnífica idea de nosotros(como padres) de ingresarlo a una escuela bilingüe…. Bueno el resultado fue desastroso. El niño se empezó a mostrar irritable, molesto, enojado, triste y sin ganas de ir a la escuela. Aunque nunca sufrió el desprecio de ningún niño si se dio cuenta que no podía más y no entendía; lo cual va creando frustración y enojo en el niño.
Por nuestra parte y en el papel de padres, te sientes triste, desilusionado,frustado, te preguntas ¿qué hice mal? … no entiendes qué pasa si le das el apoyo terapéutico, etc. La relación de pareja por supuesto se torna difícil, porque no sabes en dónde realmente estás ubicado, qué hacer, cada uno piensa diferente… en fin es difícil, pero hay que actuar con inteligencia, objetividad y solidez.
Finalmente y después de muchos apoyos especiales recibidos por parte de la escuela, su directora, psicóloga y nosotros(padres) decidimos que no era la escuela para nuestros hijo y que necesitaba una escuela mucho más pequeña, de grupos reducidos y de formación tradicional. Lo anterior para facilitar el entendimiento del aprendizaje. Y así decidimos que era preciso que David repitiera KIII y empezara en otro colegio más pequeño.
APOYO NEUROLÓGICO.
A estas alturas y después de no obtener resultados con las terapias, decidimos consultar a un neurólogo para saber qué es lo pasaba en la cabecita de nuestro hijo. Realizamos dos estudios de mapeo cerebral y en ambos el resultado fue coincidente. Se confirmó que nuestro hijo tiene TDA sin hiperactividad. Su neurólogo el Dr. Adalberto González Astiazarán un ángel en el camino que nos explicó de forma precisa y objetiva la enfermedad y nos dio la pauta para enfrentarla.
Así, David empezó a tomar medicamento a los 5 años y 8 meses, que lejos de todos los tabúes empezaron a funcionar de manera sorprendente.
Fue increíble, como si le hubiéramos puesto lentes y él empezase a ver todo de forma clara.
UNA NUEVA LUZ HA NACIDO.
Para el año 2006 nació nuestro segundo hijo de nombre Emilio. Contentos recibimos a nuestro pequeño. Emilio a diferencia de David no ingresó a la escuela durante sus 3 primeros años de vida. Así es que inició su educación pre-escolar a los 3 años de vida en la misma escuela a la cuál ingresó David.
TERCERA ETAPA. CONTINUAMOS CON DEBILIDADES Y SIN NINGUNA LUZ DE APOYO Y CRECIMIENTO ESCOLAR.
La 1° elección fue sin lugar a dudas el PEOR error. Aunque tuvimos varias juntas con la directora para explicarle del TDA de David y el apoyo que se necesitaba, la escuela no tenía la más mínima experiencia, ni el trato para atender las necesidades que David y Emilio(quién empezó a mostrar deficiencias) requerían. No había psicóloga, no existía calidez y aunque los grupos eran reducidos, no existe una educación personalizada. Muy al contrario encontramos lo siguiente:
David: Aunque David iba progresando aún requería un ritmo más lento para poder entender claramente lo visto en clase. No recibió apoyo y quedó saturado de tareas. Lejos de recibir un apoyo fue señalado y ciertamente se sintió nuevamente atacado y frustrado.
Emilio: Empezó a mostrar la sintomatología típica de un niño con TDA (déficit de atención) misma que demostró su hermano. Lapsos de atención cortos y o nulos, mala motricidad fina y gruesa, deficiencias en el proceso de aprendizaje. Resultado: La escuela simplemente lo ignoró. Un día llegamos a realizar un pago y para nuestra sorpresa mi hijo estaba en un rincón del salón sin que nadie le hiciera caso….
Al terminar el ciclo escolar correspondiente al 1º de primaria buscamos diferentes opciones para ambos. Así un día buscando y consultando llegamos a lo indicado.
CUARTA ETAPA: POR FIN LUZ, APOYO, CRECIMIENTO Y DESARROLLO. ISKALTI.
Desde la primera cita con su directora la Lic. Alejandra Flores Ramírez, me sentí plenamente identificada. Ella entendió al platicarle nuestras experiencias la frustración y coraje que como padres sientes y nos brindó el apoyo y la confianza para sacar adelante a nuestro hijo. Es simplemente lo mejor que nos ha pasado y estamos agradecidos.
A la fecha todo de lo que se nos dijo se ha cumplido.
Primeramente: Se analizan las fortalezas y debilidades de cada pequeño. Se les enseña a controlar sus emociones. Se cuenta con apoyo psicológico. Grupos reducidos. Entendimiento y calidez, pero principalmente paciencia con los niños y adecuación acorde al ritmo del proceso de aprendizaje de cada pequeño.
Obvio David fue diferente desde el primer mes. A los 8 años una de las grandes dificultades que aún no se superaban era escribir correctamente y aún no sabía leer. Esto era frustrante ya que David tuvo por más de 1 año (De los 6 a los 7 años) apoyo especial en casa para lograr leer sin éxito alguno.
En cambio en el Iskalti lo logró apenas en 2 meses. Ni qué decir de su carácter y actitud. Estas se han fortalecido de forma increíble. Todo cambió. A la fecha él va feliz a la escuela.
En el caso de Emilio, y después de lo vivido con David lo inscribimos sin mayor expectativa académica en el kinder de la esquina de la casa… Hobbit…La verdad sin tanto renombre y explicando previamente su caso de TDA lo atendieron de maravilla. Nuestro objetivo como padres a estas alturas era que no lastimaran su autoestima como nos pasó en la escuela previa y así fue. Lo apoyaron en un grupo de PECES principalmente para que controlara sus emociones y no se mostrase enojado o irritado. Esto fue algo que le quedó marcado después de la escuela previa. El aprendió a seguir órdenes y algunas cosas básicas de la etapa de pre-escolar. No aprendió a leer ni a escribir y aprendió los números hasta el numero 20.
En el aspecto neurológico y por instrucciones del Dr. Aztiazarán, se le realizó el mapeo cerebral y empezó a tomar medicamentos desde los 3 años de edad.
Tal vez la historia de Emilio sea corta en comparación con la descrita con David que fue para nosotros un Calvario, pero el saber que Emilio ingresaría a ISKALTI igual que David nos dio la tranquilidad de saber que él iba a estar bien.
Nuevamente así ha sido. Emilio va actualmente en 1º de primaria y tiene 7 años. Ya aprendió a tomar el lápiz, ya escribe, ya sabe los números hasta el 30 empieza a sumar y restar. Lo más importante se ha fortalecido su persona en todos los aspectos.
El TDA (Déficit de atención) es una enfermedad que no tiene fecha de inicio, ni de término. Es una forma de aprender a vivir con ella, pero principalmente de saber apoyar a nuestros hijos con amor y paciencia. El tener un equipo de trabajo que apoye su desarrollo dentro y fuera de casa es simplemente invaluable. Por ello el colegio ISKALTI es así, como lo dice un lugar de crecimiento en el que padres e hijos aprendemos de la mano.
Gracias .
Mich
Mi chiquita inició muy normal, un embarazo a término, un apgar 9-9.
No hubo problemas hasta iniciar la escuela, entró a la misma escuela que su hermana, pero la evolución no era la misma, a nivel motriz era más lenta y en el habla también, la psicóloga del colegio nos recomendó llevarla con un neurólogo y llegamos con el Dr. Saúl Garza.
Con todo el miedo que unos padres pueden tener al pensar que su chiquita tiene algo que no debería tener, después de exámenes concluyó que era sólo una inmadurez de lóbulo frontal que a la larga maduraría con apoyo de terapia y medicamento; así es que inició terapias, pero la escuela en la que estaba la presionaba demasiado, eran muchos niños, las maestras no veían el bulling al ser tantos, ni se preocupaban por dar una atención extra porque el objetivo es que el grupo lleve un nivel, no que todos los chiquitos puedan aunque haya que prestarles más atención. En fin, la sacamos a mitad de año porque no era una escuela para ella, su autoestima ya estaba muy mermada y como mamá fue muy difícil…uno cree que no se va a adaptar en un lugar nuevo, que va a pasar lo mismo y la verdad es que uno tiene miedo, no acepta que es lo mejor para el niño y lo ve como un fracaso personal.
De entrada, no aceptas que hay que buscar opciones que realmente sean buenas, la cambiamos a otro colegio pequeño, en donde hizo kinder tres, prepri y primero, la hicieron repetir prepri porque "era más lenta e inmadura" pero nos mandaron con un paidopsiquiatra y una nueva terapeuta, sobra decir que cuando hizo prepri por segunda vez, ni siquiera estudiaba porque lo sabía todo, cuando términó primero querían que lo repitiera y en ese momento decidimos que el ciclo allí había terminado; si bien no hubo tantas quejas como en la primera escuela porque mi niña nació con una estrellota y un carisma enorme, sí hubo quejas por el comportamiento, porque no permanecía en el salón, porque no prestaba atención a la maestra, porque mil cosas. Cuando decidimos cambiarla la aceptaron en varias escuelas y fue a días de prueba en ellas, pero hubo una que desde que entramos como papás nos sentimos bien y la pequeña desde que fue a la prueba se sintió en su sitio, ese lugar fue ISKALTI. Conservamos el paidopsiquiatra , el Dr. Luis Méndez que se dedica a TDA y finalmente con el Dr. Garza, la habían diagnosticado y dado tratamiento con concerta y a su terapeuta Elena Rubinstain.
La terapeuta y el paidopsiquiatra conocieron la escuela y se quedaron impresionados del manejo con los niños, mi niña cambió para bien, su dinámica familiar, sus relaciones en la escuela, su aprovechamiento, todo se modificó poco a poco. No puedo decir que todo sea miel sobre hojuelas y que no tenga que llamarle la atención o que no tenga problemas con su hermana u otros niños, estaría mintiendo, pero los incidentes son distintos, son constructivos, podemos hablar, puede aceptar que se equivocó y puede modificar, podemos ver la luz al final del túnel y lo más importante puedo decir que es una niña con autoestima sana, y es una niña feliz que al final es a lo que venimos a este mundo, todo lo demás se da solo, pero el ser feliz no es algo que todo el mundo tenga y ella lo es.
Pocas lágrimas he visto tan sinceras como las de los chiquitos que salen ISKALTI y eso es porque encontraron un lugar al que pertenecer, en donde crecer, en donde aprender a tener control y como convertir deficiencias en aspectos a mejorar y fortalezas en puntos que explotar; todo eso hace una diferencia y cambia a niños rechazados en adolescentes seguros, independientes y que van a ser adultos exitosos.
No soy creyente, pero creo que algo muy bueno hicimos para encontrarnos en nuestro camino a Alejandra y a ISKALTI y creo firmemente que mucho de lo que es hoy mi hija y de lo que me hace sentir orgullo por lo que logra todos los días se los debe, y yo les debo el tratar de ser mejor persona diario para pagar en un poco lo mucho que nos dan.
Por ultimo quisiera compartir algo que aprendimos; no hay que guiarse por lo que dice la amiga, el compadre o un conocido bien intencionado, hay que buscar expertos, porque nos jugamos lo más preciado que nos ha sido confiado, el futuro de nuestros hijos.
ÁNGEL
MILA
RESEÑA PARA ISKALTI
Mi nombre es José Luis Ramírez Dueñas y soy padre del niño José Luis Ramírez Almanza, quien actualmente tiene la edad de 10 años y es alumno de Cuarto Grado de Educación Primaria en ISKALTI.
Cuando mi hijo Luisito tenía la edad de tres años de edad aproximadamente, lo inscribí en maternal en un colegio bilingüe de gran renombre.
Un día, había sido citado por la maestra. Al entrar al patio del colegio, vi a Luisito jugando solo, en una bardita de piedra, separado de sus compañeros de salón, la maestra estaba con el grupo de alumnos realizando trabajos físicos en el patio. Me dio mucha tristeza ver que mi hijo no interactuaba con sus compañeros de escuela y que para él no era interesante o declinaba en sus intenciones de interactuar con ellos por no saber cómo hacerlo.
Al poco tiempo, la psicóloga del colegio, nos citó a mi esposa y a mí, para decirnos que Luisito tenía que ser examinado clínicamente, toda vez que no tenía un desarrollo igual a los demás alumnos del colegio.
Llevamos a Luisito al Instituto Nacional de Psiquiatría, lugar en el que le hicieron exámenes durmiéndolo para ver si tenía algún problema auditivo. En entrevista, un Psicólogo o Psiquiatra de ese instituto, nos preguntó insistentemente en varias ocasiones si Luisito se masturbaba (un niño de tres años), pregunta que tomé como aberrante y nunca más regresamos a ese nosocomio.
Posteriormente estuvimos visitando a muchos terapeutas. Uno de ellos nos envío a un laboratorio para que se le hicieran exámenes para descartar un daño físico cerebral, lo cual realizamos y se determinó clínicamente que Luisito no tenía ningún tipo de daño cerebral; otro terapeuta determinó que Luisito tenía rasgos de autismo; otro terapeuta determinó que Luisito tenía un retraso general del desarrollo; otro terapeuta determinó que Luisito tenía Trastorno de Déficit de Atención.
Así las cosas, en otra ocasión llegué al colegio para recoger a Luisito al terminar el día de clases, pero no veía que saliera Luisito, me introduje un poco al patio de la escuela y vi a la maestra de Luisito sentada con mi hijo sobre sus piernas, abrazándolo tiernamente y acariciándolo y besándolo con mucho cariño. Luisito quería mucho a su maestra, y aún cuando no podía interactuar con sus compañeros de salón, la maestra se daba cuenta de la calidad humana de Luisito y lo adoraba al igual que él a ella.
Desgraciadamente, al ver que mi hijo ya estaba marcado por la Psicóloga del colegio, mi esposa y yo, optamos por cambiarlo de escuela, y lo inscribimos en kínder en otro Instituto, lugar en el que cursó un año de kínder, sin embargo, Luisito no quería ir a esa escuela, al llegar al colegio, se jaloneaba con las maestras y lloraba. Terminó el año de kínder en el con calificación promedio de 6.
En el Instituto, dejaron de impartir kínder por falta de alumnos y tuvimos que inscribir a Luisito en un Centro Montessori en la Colonia Narvarte, en el aquí cursó segundo y tercer grado de kínder con calificación de 6. Sin embargo, en dicho colegio empezaron a tener distinciones con Luisito, ya que cuando salían de la escuela en grupo, para visitar lugares, pedían a mi esposa que acompañara a Luisito, porque no obedecía a las maestras.
Una vez que Luisito terminó el tercer grado de kínder, le dieron su certificado de kínder para que lo inscribiéramos ya en la primaria, sin embargo, mi esposa y yo decidimos que repitiera el tercer grado de kínder, ya que sentíamos que no estaba preparado para entrar a primaria y no queríamos que fuera objeto de bullying por parte de sus compañeros de clase; situación que ya se había presentado
Luisito repitió el tercer año de kínder porque así lo decidimos mi esposa y yo, sin embargo, obtuvo calificación de 6.
Llegó el tiempo de que Luisito entrara a la escuela primaria.
En todas las escuelas que nos presentábamos inmediatamente canalizaban a Luisito a exámenes psicológicos, los cuales reprobaba en una sesión de menos de dos horas, es decir, las psicólogas de las escuelas, en una sesión de menos de dos horas, inmediatamente determinaban que Luisito tenía problemas de desarrollo o de TDA o de autismo y las maestras de los colegios Montessori no querían tener la responsabilidad de tener un alumno como Luisito, maestras de Montessori, que recibieron un curso de dos días y ya eran maestras Montessori, situación que quedaba dentro de mis pensamientos (¿cómo era posible que una persona con un curso de dos días ya podía ser maestra Montessori?; ¿cómo esa maestra iba a enseñar a mi hijo la educación primaria?.
Después de visitar más de diez escuelas primarias en las que rechazaron a Luisito, visitamos una escuela en la que sí recibían a Luisito lugar que pero nos dimos cuenta de que era una escuela para niños que tenían severos daños cerebrales, yo pensé ¿qué de verdad mi hijo está tan dañado y yo no me quiero dar cuenta?, nos fuimos destrozados del alma a casa. No inscribimos a Luisito en esa escuela.
Otra escuela que visitamos fue la de una escuela primaria de Religiosas , en esa escuela nos dijeron que entregáramos a Luisito para exámenes a las 10:00 horas y que lo deberíamos recoger a las 14:00 horas de ese día, lo entregué y me retiré, a las 11:30 horas, las monjitas me llamaron para que recogiera a Luisito, ya que se había subido al tercer piso de la escuela y estaba arriba de un barandal, las monjitas casi murieron del susto y pues no pude inscribir a Luisito en esa escuela.
Nos presentamos en otra escuela Montessori, por error, nos aceptaron a Luisito, es decir, probablemente pensaron que Luisito ya había sido examinado por sus psicólogas y Luisito quedó inscrito para el equivalente al primer año de primaria, sin embargo, pagamos caro nuestro atrevimiento, lo digo esto llorando, ya que empezaron a citarnos continuamente y nos reclamaban que ya no podían quitarle la inscripción a Luisito porque estaba prohibido por la Secretaría de Educación Pública, les dijimos que Luisito estaba bien, pero la maestra Montessori, una maestra de dos días de preparación como maestra, sólo hacía caras de disgusto. Pagamos caro nuestro atrevimiento, cuando recogía a Luisito, tenía marcas en la cara, le preguntaba el porqué tenía esas arrugas en la cara y me decía “es que la maestra me metió al cuarto para que me durmiera, yo no tenía sueño, pero como me dejó mucho tiempo, me dormí”.
De inmediato optamos por preguntar en el Instituto donde había estado anteriormente, por la probabilidad de poder inscribir a Luisito en la Primaria, sin embargo, Luisito ya también estaba marcado en esa escuela y no lo quisieron recibir, sin embargo, nos canalizaron a Iskalti.
Ya totalmente decepcionados mi esposa y yo, nos presentamos en Iskalti, con la Directora Miss Ale. Debo de ser sincero, de inmediato pensé que era una escuela con alumnos que presentaban daños cerebrales severos, sin embargo, pudimos ver que Miss Ale, es una profesionista que cuenta con estudios superiores a cualquiera de todas las maestras que visitamos tratando de que nos aceptaran a Luisito en escuela primaria, Miss Ale, me ilustró respecto de los niños con capacidades especiales y pudimos ver que las maestras no son maestras formadas en cursos de dos días, que en Iskalti, las maestras son profesoras normalistas, caso rarísimo en escuelas particulares de México.
Al final del primer año de primaria de Luisito, su maestra me llamó y me dijo:
“SEÑOR, LUISITO APROBÓ SU PRIMER AÑO DE PRIMARIA CON SEIS, PERO ESTE SEIS SÍ ES DE LUISITO”.
Hoy día, Luisito se está desarrollando normalmente como cualquier niño de su edad, tiene muy buenas calificaciones en la escuela, probablemente hay materias en las que no obtiene diez de calificación, pero sí saca un ocho, puedo estar seguro que este ocho sí es de Luisito, gracias a la dedicación y empeño de los seres humanos de ISKALTI, ellos nos guían a Luisito y a sus padres para poder ayudarlo en todos los sentidos, hoy regresamos con el neuro-pediatra a efecto de que lo revise y vea el desarrollo adecuado de su corteza cerebral, esto porque ISKALTI nos orienta para eso.
Miss Ale, debe sentir hoy el orgullo, la tranquilidad y la satisfacción del deber cumplido, con la frente en alto, digna de respeto, admiración y amor.
México y el mundo deberán conocer el concepto de ISKALTI, para ayuda de todos los niños en el mundo que sean marcados erróneamente como niños con capacidades diferentes (discapacitados), por tener capacidades especiales superiores a las de otros niños. Deberá cuidar Mis Ale su concepto y registrar su derechos intelectuales o derechos de autor, para evitar que astutos, con fines de lucro, carentes de valores, formen maestras de dos días como maestras ISKALTI, tal y como lo hacen hoy con el concepto Montessori.
Mi deseo es que Miss Ale, sea valorada por nuestro gobierno y le den los recursos suficientes para que desarrolle su concepto en México ayudando cada vez a más niños como sólo ella puede hacerlo, así como ayudó a mi Luisito y no se tenga que ir a otro país Miss Ale, para que la apoyen para este fin.
Gracias IskaltiGracias Miss Ale.
DAVID Y EMILIO
México, D.F. a 09 de Abril de 2014.
Miss. Alejandra M. Flores R.:
Quisiera comentarle brevemente lo que hemos vivido desde que planeamos embarazarnos, desde el momento en que decidimos que estábamos listos para ser Papás.
Tuvimos que enfrentar la dificultad de la edad; yo tenía 35 años por lo que tuve que someterme a varios estudios e incluso operaciones para poder concebir a Ángel, hasta que finalmente tuve la fortuna de estar embarazada. A partir de aquí inicia la gran aventura y el reto más importante de nuestras vidas.
Desde mi punto de vista, considero que tuve un embarazo muy tranquilo, sólo con las molestias normales, durante el transcurso de éste pude hacer ejercicio, natación y caminata, incluso dejé de trabajar para conseguir estar relajada y afortunadamente todos estos cuidados rindieron fruto porque cumplí mi periodo de gestación y Ángel nació sin ningún contratiempo.
Posteriormente estuve muy al pendiente del desarrollo de Ángel hasta los 7 meses de nacido y fue entonces cuando me reincorporé a trabajar y Ángel ingresó a la guardería y fue ahí donde por primera vez detectaron que Ángel tenía un retraso en psicomotricidad fina y gruesa y le costó más tiempo del normal aprender a incorporarse, gatear y en consecuencia caminar y cuando llegó el tiempo de hablar, él no podía comunicarse porque su vocabulario era muy pobre y sólo usaba palabras aisladas, no las podía enlazar para hacer una frase y de la Guardería me canalizaron al IMSS para que valoraran a Ángel, pero los Médicos me dijeron que en cuanto entrara a la escuela las cosas mejorarían, pero lamentablemente no fue así, porque fue a partir de ese momento que nos percatamos que lo que enfrentaríamos era un asunto relevante y que Ángel necesitaba de todo nuestro apoyo y constancia para salir adelante.
Fue entonces que ingresó al Kinder y como Ángel es nuestro único hijo, estábamos muy entusiasmados y nos esmeramos en todos los materiales que nos pidieron, libros, cuadernos, uniformes, etc.; pero cuando llegó el momento de aprender, Ángel no podía ir al mismo ritmo que los demás niños y entonces empezó también a tener un mayor impacto el hecho de que le costaba mucho trabajo comunicarse; sin embargo, pienso que también influyó mucho la falta de profesionalismo de las maestras del Kínder, porque no sabían tratarlo, le gritaban o lo obligaban a permanecer sentado por lapsos de tiempo muy grandes y como Ángel no podía defenderse hablando, entonces empujaba o mordía y fue ahí donde por primera vez experimentamos lo cruel que puede ser un Adulto con un NIÑO porque al no saber cómo tratarlo la solución más fácil que encontraron fue darlo de baja a sólo dos semanas de haber iniciado el ciclo escolar.
Fue entonces que empezamos a buscar ayuda especializada y a darnos cuenta que afortunadamente hay gente sensible a este tipo de problemáticas y que siempre están dispuestos a ayudar y que aún cuando son escasas, pero que cuando se presentan en tu camino te impulsan a salir adelante, que fue el caso del segundo Kinder al que ingresó “Centro Educativo Agazzi” donde gracias a su directora la Lic. Karina Denisse Sobrino Ramírez, fue que encontramos un lugar donde Ángel pudo desarrollarse de acuerdo con su propio ritmo de aprendizaje y donde fue tratado igual que los demás niños.
Sin embargo, había que seguir adelante con la educación de Ángel y gracias a que su Neuropediatra el Dr. Fernando Quiñonez de la Fuente, nos hizo muy consientes de la situación nos pidió que lo inscribiéramos en una escuela que tuviera pocos alumnos, donde la educación fuera más personalizada y después de buscar por más de un año nos encontramos con ISKALTI, tuvimos la fortuna de conocer a Miss. Alejandra M Flores R, quien entendió desde el primer momento la situación crítica por la que estábamos pasando y aún cuando nuestra condición económica no nos permitía cubrir el costo total de las colegiaturas nos apoyó con una Beca del 50% y haciendo ajustes a nuestro gasto familiar y con la invaluable ayuda de la FAMILIA, pudimos inscribir a Ángel.
Haciendo un balance hoy podemos decir que la mejor decisión que hemos tomado con respecto a la educación de Ángel, ha sido inscribirlo y mantenerlo en ISKALTI, aquí Ángel ha encontrado una segunda Familia con ayuda de sus Maestras: Miss Lupita, Miss Lety, Miss Paty y todo el personal docente, gracias a todos ellos él ha aprendido a controlar sus impulsos, a expresarse, a compartir, su autoestima se ha mantenido intacta y hoy vemos que esta decisión está rindiendo frutos porque ya está escribiendo y empezando a leer .
A través de nuestro hijo podemos constatar que el Lema de ISKALTI que es LUGAR DE CRECIMIENTO, se está cumpliendo con el desarrollo y los avances que está teniendo Ángel.
Sabemos que este es un largo y sinuoso camino, pero hemos tenido un buen inicio y si continuamos haciendo las cosas con constancia, esfuerzo, paciencia y trabajando en equipo lograremos hacer de Ángel un niño FELIZ.
Sólo nos resta AGRADECER de todo corazón, el que nos hayan permitido formar parte de la FAMILIA ISKALTI.
A T E N T A M E N T E .
Edith Jiménez Portillo Ignacio Bolaños Morales.
MICH
SANTI
JOSÉ LUIS
Nosotros solo queremos expresar nuestro más profundo agradecimiento y reconocimiento a la labor y desempeño que llevan a cabo en lskalti.
Santi llego a lskalti a los 8 años y viene de pasar por circunstancias que no se esperarían a tan corta edad.
Después de su paso por la guardería con un desarrollo y comportamiento normal, lo inscribimos en el kínder. Y aquí inicia el problema. Confiando que era una institución con personal capacitado. Santiago empieza a presentar “conflictos" curiosamente no con sus compañeros como se esperaría, sino con la maestra. Desafortunadamente la falta de capacidad de la maestra en el manejo de los pequeños da como resultado que los conflictos incrementen. Al llegar a casa nos percatamos al llegar la hora de baño, que tenía los brazos marcados con moretones de la forma de las manos que lo tenían sujetado. ¡Agredieron a un niño de tan solo 5 años por no saber “controlarlo"! . Desde luego ese fue su ultimo día en esa escuela. Al incorporarse Santiago a la primaria elegimos una escuela particular con una supuesta “súper reputación y años de experiencia" con “enseñanza en valores cristianos" pensando en su vocación humanitaria nos brindaría apoyo y comprensión a base de cariño hacia Santiago para superar estas malas experiencias. Que error!. Esta escuela nos demostró que prefieren a niños que por su apariencia física y de comportamiento dócil, que a niños como Santiago que se defienden, cuestionan. En esta escuela duro solo 2 años. Iniciaron acciones contra Santiago por parte de la escuela, todas indicadas por la Directora, en las que al niño lo ignoraban (que hiciera lo que quisiera, así no habría que lidiar con él, así si el niño quería estar todo el día en el patio, así lo dejaban, por ejemplo). Les decían a sus compañeritos de salón que no jugaran con él, que era especial, que podía agredirlos. En varias ocasiones lo dejaron encerrado en el salón y sacaron a todos sus compañeros que "por precaución". Nos condicionaron la permanencia al colegio si el niño no acudía a algún neurólogo y recibía tratamiento. Tanto los estudios neurológicos como los psicológicos determinaron que no había necesidad de medicación que se trataba de un problema conductual, y aunque el colegio tenia personal psicológico de apoyo, nos obligó a traer un soporte psicológico DIARIO que estuviera haciendo la labor de custodia con Santiago. Al final nos negaron la reinscripción. Santiago se sintió expulsado, etiquetado, discriminado, se sintió que él era el “malo".Llegamos en nuestra desesperación como padres por encontrar un lugar que junto con nosotros nos apoyara en hacer sentir a Santiago que la escuela no es un lugar al que hay que defenderse, donde lo van a atacar, sentirse parte de una comunidad, sentirse aceptado y al mismo tiempo le enseñaran lo que es una escuela. Fuimos a varias escuelas sin éxito. Entonces encontramos lskalti y a miss Ale, que con su amable sonrisa y sus palabras de comprensión nos recibieron. Recuerdo que nos dijo: “no te preocupes, aquí lo recibiremos con mucho cariño, aquí no será expulsado, aquí le enseñaremos con amor y él al final podrá reconocer y analizar sus acciones". Ahora Santiago tiene muchos amigos, es parte de un grupo. no se siente discriminado, es más creo que los malos momentos ya se le han olvidado. Les tiene mucho cariño a sus maestras, también respeto. Hace su tarea sólo con mucho entusiasmo. No quiere quedar mal con sus obligaciones, aunque como cualquier niño de repente tiene sus reportes, pero todo como cualquier pequeño de su edad. Nosotros como papás dejamos a Santiago en su escuela con la tranquilidad que lo va a disfrutar, a trabajar como debe de ser, y no con el miedo de lo que le pudieran hacer. Muchas gracias lskalti, por la vocación de tus maestras, su paciencia, su preparación. Por la maravillosa capacidad de Miss Paty, la psicóloga del colegio, quien nos mostró una gran experiencia al momento de evaluar y trabajar con Santiago. Nos sentimos infinitamente agradecidos. En lskalti, no discriminan, enseñan a los niños a valorarse, a confiar en sus capacidades, a no juzgar, , a sentir empatía, a razonar. En verdad es "un lugar de crecimiento" ... Que siga por siempre lskalti, queremos que crezca y que mucha gente lo conozca!!!SANDRA LOPEZ NAVARRO
En Iskalti encontramos un entorno educativo sorprendentemente avanzado. Es una institución que, de manera personalizada, pone el foco en los potenciales individuales del alumno, y no en apegarse a un programa diseñado con base en promedios… precisamente esto es lo que los distingue; mi hija y sus compañeros no forman parte de ese promedio. Además de este acercamiento agudo y moderno a las necesidades específicas de alumnos excepcionales, el equipo docente tiene capacidades sobresalientes para proveer a los alumnos una atmósfera emocional propicia para potenciar su seguridad en sí mismos, una herramienta invaluable para su futuro. La filosofía de esta escuela debería ser ejemplo global de educación. Creo que Iskalti es una de las mejores decisiones que hemos tomado en lo que se refiere a la educación de nuestra hija.Alexander DahmEndFragmentLa atención que como familia recibimos por parte de todo el plantel fue y sigue siendo excepcional.Desde el inicio pudimos sentir cómo el desarrollo de Mila y su desenvolvimiento, mejoraron de manera significativa. El interés que ella manifestaba por ir a la escuela, ver a sus maestras y sobre todo trabajar y hacer sus tareas, nos mostraron rápidamente que su confianza en sí misma la motivaba a seguir esforzándose, pues ella misma vio resultados.Gracias por ser parte fundamental en una de las etapas más hermosas en la vida de nuestra Mila.Cariños,Laura
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